Guía del corredor empedernido: cómo empezar a correr
Consejos para principiantes para empezar a correr desde cero.
Por Ivan Peralta
Querido lector, te saluda tu amigo Iván –el provinciano por excelencia– y tu guía a partir de ahora en muchas actividades de las cuales, sin ser experto, los golpes de la vida me han dado la suficiente experiencia para compartir.
Si bien, desde que tengo memoria, el deporte me ha perseguido de muchas formas, desde el futbol, basquetbol (y casi todos los deporte que involucren una pelota), el mundo del running siempre ha sido parte de mi existencia desde que aprendí a caminar un 14 de abril de 1988.
Mucha gente me ha preguntado cuáles serían los elementos a considerar sobre cómo empezar a correr desde cero. En esta entrega –de otras por venir– me gustaría cubrir cinco aspectos que creo esenciales para poder emprender la ruta a convertirte en un corredor empedernido.
Parece algo lógico pero poca gente considera este aspecto como un elemento básico antes de comenzar a correr. Recordemos que correr hace que movamos un 70% más de músculos que no usamos a lo largo del día, hace que generemos endorfinas, fortalece los huesos, mejora nuestras defensas y por si fuera poco es el cardio que más quema grasa.
Sin embargo para poder comenzar a hacerlo debemos tener claro que todo nuestro cuerpo debe funcionar correctamente. Te invito a que te hagas un chequeo médico general antes de poder lanzarte a las pistas, ya que una dificultad respiratoria, un problema en las rodillas, un esguince mal cuidado o incluso una larga vida sedentaria pueden ocasionar que el entrenamiento se pueda volver doloroso y en una experiencia para recordar (de mala forma).
Pongamos todos los elementos de nuestra salud a favor y así como llevamos el coche a revisión antes de salir a carretera, hagamos lo mismo con el mejor motor: nuestro sagrado cuerpecito.
El lucir bien nos ayuda siempre y en el área deportiva no es la excepción. Utilizar ropa con la que nos sentimos atractivos y cómodos, favorece en un 50 % nuestra energía y nuestra actitud positiva. Pongámonos guapos entonces para salir a correr entonces. Nos han dicho que debemos guardar nuestra mejor ropa para una fiesta pero, les tengo una noticia: ¡La vida en sí es una fiesta! Cada día que amanecemos con vida es algo digno de celebrar y porque no hacerlo con esa playera que mejor nos queda, ese top que te ayuda a lucir mejor las curvas o esos tenis de colores fosforescentes que además de ayudar a la visibilidad, hacen que te sientas más fuerte (y de moda).
Como corredor les puedo decir que consideren siempre que aparte de usar ropa que les guste, traten de buscar las prendas más cómodas, que provoquen el menor número de rozaduras (hay días en que salgo caminando como si hubiera ido a montar) o que estén hechas de materiales que permitan que el sudor fluya de mejor manera y evite que se transformen en una sopa durante su recorrido.
Tengo varias marcas en mente que uso y recomiendo, cuyas prendas son ideales para correr pero eso lo tocaré en la siguiente entrega.
Amigo, un error común es el intentar correr con los primeros tenis que tengas a la mano; no digo que te debas comprar unos específicos para correr, pero si tienes la opción en verdad hazlo. Tengo varios amigos han comenzado a correr con tenis de vestir, con zapatos o incluso con chanclas (dependiendo también de su estado etílico). Esto no sólo hace que sea más complicado el correr, sino que repercute en la pisada, en las rodillas, en la columna y en el cuerpo en general. Recuerda que correr es un impacto constante en las piernas y rodillas, trata de hacerlo lo más liviano posible con el calzado correcto como podría ser cualquier tenis con la suela curveada (evitemos correr con tenis tipo Vans; se puede ver bien pero no ayuda para nada al correr).
Dependiendo del lugar donde vivas y de donde me estés leyendo, podría variar un poco este punto pero la recomendación general es tratar de correr sin mucho sol, sin mucho calor (máximo 25 grados centígrados) y sin mucho frío (no menos de 10 grados centígrados).
En una ciudad como la CDMX o incluso las ciudades aledañas, el mejor horario para correr es antes de las 7 a.m. Entiendo que levantarse temprano a correr es muy complicado, pero toma en cuenta que tendrás todo el resto del día para poder disfrutar, trabajar o incluso hacer tu rutina diaria sabiendo que ya comenzaste la mañana de la mejor forma.
El calor o frío extremo hace que tengamos más dificultad para respirar, nos deshidratemos en mayor grado o podamos tener descompensación. Busquemos la mejor hora para correr, donde no interfiera con nuestras actividades diarias. Muchos me han preguntado si recomiendo correr en la noche, la verdad es que lo he intentado y solo hace que se active más mi cerebro y me cueste dormir. No tomen esto como algo mandatorio, ustedes intenten correr en el horario que más cómodos se sientan y como bien dijimos antes, poniendo todo a favor para que salga de la mejor forma.
Lo ideal y recomendable es que puedas correr en terrenos no tan duros para reducir el impacto en las rodillas pero sabemos que esto se vuelve complicado y más en una ciudad como la CDMX o con una rutina laboral extenuante. Si tienes acceso a una banda de correr estática, es una excelente forma de mejorar tu coordinación y de reducir el impacto.
Viniendo de una ciudad chiquita (mi hermoso Tehuacanyork), disfruto todos los días de estar rodeado de edificios altos, de construcciones nuevas y de mucha gente, por lo que corro por el centro de la CDMX, pasando frente a Bellas Artes, esquivando a los vendedores y recorriendo la ciudad que me recibió hace nueve años.
Lo ideal para comenzar a correr es dar el primer paso, lo demás llega solito, así que amigo con ganas de correr, te invito a visualizarte corriendo, a comenzar a verte ya haciéndolo y a saber que más allá de un beneficio para tu salud (que sí lo es), representa un regalo para ti mismo donde todo será positivo.
¿Qué hacer para empezar a correr desde cero?
Mis 3 consejos para hacer antes de tu primer día corriendo serían los siguientes:
1. Nunca corras con el estómago vacío. De ser posible come una fruta antes (de preferencia un plátano) o un puño de nueces; no sólo te dará la energía necesaria, sino que esto hará que el cardio queme grasa y no músculo.
2. Elige tu ropa para correr una noche antes. El ejercicio comienza desde el cerebro y qué mejor que prepararnos para dicha actividad antes de dormir.
3. Que la música sea tu mejor aliada. Elige las canciones que te hagan sentir poderoso y con la fuerza necesaria para terminar tu sesión.
Si tienes alguna duda, comentario o incluso quieres salir a correr escríbeme en mis redes sociales y armemos el grupo para correr.
Hagamos de la salud y el deporte nuestro pan de cada día, la mejor forma de adquirir el hábito de correr es hacerlo de forma constante.
No hay distancia pequeña, si te cuesta mucho trabajo, empieza corriendo 20 minutos, mide la distancia recorrida e increméntala paulatinamente. Si puedes consigue un/a compañero/a y pon atención a la forma de correr de otros.
¡Nos seguimos leyendo!