Armando Takeda
El graduado de Central Saint Martins College of Art and Design, en Londres, regresa a su país natal, para consolidar la primer marca de alta costura en México.
Siete colecciones han sido presentadas bajo la marca homónima; cinco en Nueva York, dos en París. Sus intenciones de establecerse en México son calculadas; el tener ya una venta consistente en el extranjero lo ha encaminado a participar en la plataforma de moda más importante en nuestro país como una inversión para darse a conocer; él sabe muy bien que el factor fama juega un papel importante en la decisión de compra del mercado mexicano.
Su experiencia trabajando en marcas top como Alexander McQueen, Bruno Pieter y Dresscamp (cuatro años como director creativo) le han dejado el expertise del uso de textiles así como el journey de compra. Adoptar la estrategia direct-to-consumers justo después de su primera presentación en México en Fashion Week el 15 de abril es un claro ejemplo; después del show abrió su primera página de e-commerce.
El network de producción de Takeda incluye un relación muy cercana con el diseño nacional al conectar con artesanos en Oaxaca para los bordados a mano; los cierres, botones y telas son traídas del extranjero para ser confeccionadas en México. Su meta es que la maquila mexicana crezca a la par de su proyecto. No se trata de una producción en serie o adopción de fast fashion, sino trabajar de cerca con el talento nacional con materias primas foráneas; retarlos a trabajar con telas híbridas y nuevas tecnologías para no encapsularse en lo tradicional y aprender en el camino juntos.
El proyecto ARMANDO TAKEDA está conformado también con la participación de Yuki Hase, novia de Takeda, quien ha trabajado con algunas líneas que forman parte de Issey Miyake. Su inspiración se basa desde un research personal hasta aprovechar cada viaje y visita de trabajo al extranjero donde presentan sus colecciones en París o Nueva York, para quedarse unos días extras y aprovechar la inspiración de las calles y museos.
Le preguntamos su opinión sobre el fast fashion, sobre lo cual Takeda tiene una opinión muy peculiar: “La entrada del fast fashion es algo a lo que deberíamos darle la bienvenida, creo que lo que la gente le llama el fashion literacy, el conocimiento de la moda tiene que subir desde abajo. Esta sensibilización de obtener un diseño, aún siendo producto de copycat o alguna colaboración con un retailer, léase H&M o Target, los interesa más sobre la moda y van aprendiendo a diferenciar una buena confección de una mala. La maduración de los consumidores los obligará tarde o temprano a buscar la fuente de la inspiración y consumir desde ahí apenas tengan la oportunidad y los recursos”.
Uno de los puntos que hace Takeda es este reto constante por reinventar que tienen las grandes casa de diseñadores cuyos productos han sido copiado. Con esto en mente, Takeda aprovecha cada oportunidad para usar técnicas y telas que aún no han usado con el principio de siempre crear algo nuevo. En cuanto a materiales, tiene dos pilares importantes: el primero es que cada temporada colaboran con Malhia Kent, empresa textil en Francia, y Linton Tweeds, Reino Unido, – fuente del tweed de Chanel- para diseñar en base a los estambres disponibles, customizaciones de teñido y ancho de los hilos para personalizar al 100% patentes únicas dentro de sus diseños. Su segundo pilar busca encontrar los materiales más premium enfocados a la tecnología; el amplio rango de telas, japonesas en su mayoría, contemplan desde lanas prensadas que no pican hasta forros de cupro hecho a base de algodón reciclado, el cual tiene un tacto más suave que la seda e igual de brilloso.
Takeda ha enfocado sus estudios -y experiencia de trabajo- en menswear, sin embargo, estos conocimientos le han bastado para dominar el fitting y, con la ayuda de Yuki, crean diseños de moda feminina más enfocados a siluetas desconstruidas que aprovechan al máximo los materiales.
Dentro de sus planes, Takeda estaría más que encantado de crear la línea de menswear; la silueta masculina borra cada vez más las líneas de género produciendo prendas gender-neutral y mientras que su marca avance, también lo hará su concepto a partir del consumo nacional que se genere. Pláticas con retailers premium como Sak’s México podrían abrir puertas para proyectos como este con tanto para ofrecer.