Parte de crecer es darte cuenta que hace falta mucho más que un nudo de “orejitas de conejo” para evitar que se desaten tus agujetas. 

Probablemente aprendiste esta lección en kinder. En mi caso fue una tarea que nos asignaron a todo el salón pero que nunca revisaron. En fin.

Años más tarde, el hombre moderno ahora pasa de la rutina deportiva en la mañana al trabajo y de ahí a la juerga, apilando diferentes tipos de calzado en los que la gran mayoría (si no es que casi todos) tiene agujetas. Si te has topado con agujetas enceradas, sintéticas o muy muy delgadas, sabes que son un verdadero dolor; pone hasta al hombre más presentable en el suelo como un idiota. BloombergBusiness hizo un pequeño tutorial de cómo con un simple twist agregado a la típica forma de amarrar agujetas puede hacer una enorme diferencia para hacerlo una sola vez mientras uses el calzado.

Acá tres estilos de acomodar las agujetas dependiendo del calzado.

FORMAL

CASUAL

SNEAKERS

Ilustraciones por Christian Capestany/Bloomberg.