Un estudio global de la Universidad de Oxford y ONU Mujeres, The Business Case for Inclusive Advertising revela que las campañas publicitarias inclusivas pueden aumentar las ventas de las marcas hasta en un 16% a largo plazo. Este hallazgo subraya la importancia de la representación y la diversidad en la publicidad moderna, y cómo estas prácticas no solo son éticamente necesarias, sino también financieramente beneficiosas.

Además, las marcas con una publicidad inclusiva una probabilidad 62% más alta de ser la primera opción de las personas consumidoras, y una probabilidad 8% más alta en la incidencia de ser probadas.

Diversidad en la Representación

Las marcas están reconociendo la necesidad de representar una variedad de identidades y experiencias en sus anuncios, reflejando la diversidad de la sociedad actual. La inclusión de diferentes etnias, géneros y orientaciones sexuales en la publicidad ha demostrado resonar más con los consumidores.

Cambio en el Comportamiento del Consumidor e impacto en el mercado

Las personas especialmente las generaciones más jóvenes, están más inclinadas a apoyar marcas que se alinean con ciertos valores con los que coinciden. Las investigaciones muestran que las personas son más propensas a comprar de marcas que representan positivamente a diferentes iniciativas de responsabilidad social, transparencia, acción por el clima o sostenibilidad.

Medición del Impacto: Las marcas están comenzando a adoptar métricas más sofisticadas para evaluar el impacto de la diversidad en sus campañas publicitarias. Esta tendencia incluye el análisis de datos de ventas, participación en redes sociales y percepción de marca.

Incremento en Ventas: La investigación indica que una publicidad inclusiva no solo mejora la percepción de la marca, sino que también tiene un impacto directo en las ventas, como lo muestra esta investigación.

Fidelización del Cliente: Al fomentar un sentido de pertenencia y representación, las marcas pueden cultivar la lealtad del cliente a largo plazo.

La publicidad inclusiva y no sexista no es solo un imperativo ético, sino también una estrategia comercial efectiva. Al integrar diversas voces y experiencias en sus campañas, las marcas pueden no solo mejorar su imagen, sino también aumentar sus ingresos de manera significativa. Esta tendencia hacia la inclusión representa un cambio fundamental en cómo las empresas abordan su marketing y la representación no sesgada de las personas consumidoras en los imaginarios colectivos.