Newtab-22 utiliza conchas marinas de desecho rescatadas de las industrias pesquera y acuícola para desarrollar un material sostenible que se asemeja al hormigón.

Llamado Sea Stone, el material se fabrica triturando conchas que están destinadas al vertedero antes de combinarlas con aglutinantes naturales y no tóxicos, otorgándole una estética similar a un terrazo.

Cada año, se descartan 7 millones de toneladas de conchas marinas. La mayoría de ellos están siendo arrojados a vertederos. Las conchas marinas no son biodegradables y, por lo tanto, contaminan la tierra y el agua cuando se desechan y el costo del proceso de eliminación es tremendo.

Según Newtab-22, Sea Stone podría convertirse en una alternativa sostenible al hormigón en el diseño de productos a pequeña escala, ya que los dos materiales comparten propiedades similares. Esto se debe a que las conchas marinas son ricas en carbonato de calcio, también conocido como piedra caliza, que se utiliza para hacer cemento, un ingrediente clave del hormigón. Según el estudio de diseño:

“Las conchas marinas desechadas, que están sucias o podridas, no se han limpiado en absoluto y se han estado amontonando cerca de la playa durante mucho tiempo, causando contaminación por olores y contaminando la tierra circundante a largo plazo. Sea Stone propone el uso de conchas marinas desechadas para crear material ambiental y económicamente sostenible en lugar de contribuir al problema de la basura en el mundo”.

Sea Stone es un proyecto de cero residuos. Se elabora a partir de subproductos de la concha que va a los vertederos después del consumo en la industria de mariscos.

Este tipo de alternativas de materiales incluso se pueden ver en los proyectos cercanos a las costas, por ejemplo en estados como Tabasco o Veracruz en México, donde en ocasiones se utiliza conchas o fragmentos como alternativa a las piedras de grava en el concreto, para elementos rígidos que pueden ser utilizadas en fachadas o en pisos, aprovechando un recurso que regularmente se tiraría y que además es contaminante.

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El consumo y la producción sostenibles consiste en poder hacer más con menos. También se trata de desvincular el crecimiento económico (lo que hasta ahora se ha considerado como progreso) de la degradación del medio ambiente, incrementar la eficiencia de recursos y promover estilos de vida más sostenibles. Conoce más.