Por qué debería importarme la limpieza de los océanos
Foto: Jorge Silva / Reuters
Estamos entrando en uno de los periodos más emocionantes para el futuro de los océanos; comprender la importancia de su conservación nos ayudará a resolver muchos de los problemas que enfrenta el mundo hoy.
Nuestro planeta es un planeta de océanos, el 70% de la Tierra está cubierta por ellos y son el hogar del 50-80% de toda la vida. No decimos a la ligera entonces que nuestro futuro y el de los océanos están íntimamente ligados (Ocean Panel). Dependemos de ellos para obtener comida, trabajo, energía y hasta inspiración. Los océanos son responsables de generar la mitad del oxígeno disponible en el planeta, absorben el 25% de todas las emisiones de CO2 y capturan el 90% del calor adicional generado por esas emisiones.
Highlight: 2014 fue el primer año en el que se consumió más pescado de granjas marinas que de la pesca salvaje; hace 40 años las granjas sólo producían el 7% del consumo humano (FAO).
Hoy, uno de los principales problemas que enfrentan los océanos es la contaminación marina y la acumulación de plástico, que degrada el ecosistema, reduce la calidad del agua y afecta directamente a especies y personas por igual; resolver este problema requiere cambios sistémicos y urgentes en nuestras acciones.
Foto: Noel Guevara / Greenpeace
Se trata del uso de plástico desechable usado en empaques y utensilios creados para una sola ocasión. Estos representan la mayor cantidad de desechos encontrados comúnmente en las playas. La lista incluye, entre muchos otros, bolsas plásticas de supermercado, colillas de cigarros, envases, botellas, popotes, cubiertos desechables y tapas.
Los residuos plásticos causan una gran cantidad de problemas cuando se filtran en el medio ambiente. Se han encontrado altas concentraciones de materiales plásticos que bloquean las vías respiratorias y los estómagos de cientos de especies marinas. Las bolsas de plástico a menudo son ingeridas por tortugas y delfines que las confunden con comida. La UNESCO estima que cada año son más de un millón las aves, y alrededor de 100,000 mamíferos los que mueren a causa de las partículas de plástico (UNESCO).
Si no hacemos algo para 2050 habrá más plástico que peces en el océano
Foto: Reuters / Arnd Weidmann
*Más de 8 millones de toneladas de plástico entran al océano cada año
*Por cada tonelada de atún que obtenemos, ponemos 2 toneladas de plástico en el océano
*Una de cada tres especies marinas que se pescan para el consumo están siendo sobre pesca
Highlight: En 2015, el 50% de la basura plástica generada fue por los empaques (ONU Medio Ambiente).
Las próximas décadas son cruciales para toda la vida que habita en los océanos y para la ambiciosa tarea de generar más comida (actualmente el 5% de la alimentación mundial), más trabajos y más energía.
¿Cómo ser parte de la solución?
A pesar del enorme reto que tenemos adelante, aún hay tiempo para actuar. Son muchas las razones para ser optimistas; el uso de nuevas tecnologías, el liderazgo de empresas y la creatividad de la sociedad nos da la oportunidad para ser parte de la solución todos los días.
Los países, las organizaciones internacionales y las empresas que han decidido ser parte de la solución siguen una serie de recomendaciones, ¡y sorpresa!, en la mayoría de esas recomendaciones a seguir, un elemento clave y con el que será posible hacer un verdadero cambio es el consumidor, es decir todos.
Si la mayoría del plástico que llega al mar es el de un sólo uso, dejemos de utilizarlo. ¿Cuándo fue la última vez que pediste un popote sin sentirte culpable? Hace relativamente poco tiempo que eso no sucedía.
Acciones que puedes empezar a hacer desde hoy
*Rechazar las bolsas y popotes de plástico, buscar sustituirlos por unos que sean biodegradables; por ejemplo cuando vayas a la tienda de conveniencia trata de llevártelos sin bolsa. Muchas veces vamos con una o más personas, en ese caso fácilmente se pueden dividir los artículos. No necesitas evangelizar, con el “sin bolsa está bien” es suficiente para que el mensaje le llegue justamente a quien ofrece las bolsas y a los que van a pagar después de ti.
*Sustituir las bolsas plásticas por tote bags o bolsas reutilizables. Muchas empresas están creando sustitutos de estas bolsas con materiales resistentes y/o reciclados.
*Si bebes té o café seguido, cambia el vaso desechable donde lo compres por un termo, a veces hay descuentos por llevar tu propia termo o taza.
*Asegúrate que estén separando correctamente la basura en tu casa o edificio para facilitar la selección y reciclaje: papel, cartón, tetrapack, aluminio, vidrio, basura inorgánica y orgánica; recuerda no agregar grasas a la basura inorgánica.
Foto: David Alfaro
*Los datos señalan que a nivel mundial sólo se ha reciclado alrededor del 9% de todo el plástico que hemos creado, por lo que cualquier acción de limpieza, por ejemplo en playas es significativo. El año pasado en El Salvador, 4Ocean realizó una limpieza con 38 voluntarios de Guatemala, Honduras y el Salvador recolectando aproximadamente 236 kgs de plástico en botellas, envases, y 14 kgs de tapas de polipropileno.
No hay cambio pequeño
Seguido nos sentimos minimizados por la enorme tarea que significan estas causas, pero hay que recordar que atacando el problema de raíz es que podremos ver la diferencia. No es un tema del plástico, sino de cómo se están diseñados los productos, pensando no sólo en su vida útil sino qué pasa con ellos después; cómo los reciclamos. Para eso tenemos que repensar nuestras actividades diarias.
Pequeñas -o grandes- acciones pueden convertirse en movimientos. El caso de Greta Thunberg, una adolescente de 16 años que un día se paró frente al parlamento sueco para pedir que hicieran algo respecto al cambio climático se convirtió en la vocera de jóvenes alrededor del mundo.